Un año de cultura popular, un año del Centro Cultural de la Juventud Aniversario, trabajo y crecimiento En la noche del pasado sábado 23 de agosto, se llevo a cabo el festejo del primer año de vida del Centro Cultural de la Juventud. Una pequeña muestra de los distintos talleres que se fueron desarrollando a lo largo del año, guitarreada, cena y un brindis colectivo, fueron los ingredientes perfectos para una noche cargada de emociones.
Todo aniversario es importante, pero más aún cuando se trata de un proyecto que materializa sueños, ilusiones, e ideales de una juventud que no baja los brazos. Es que hace un año abría sus puertas al barrio Almafuerte y a la juventud de Berazategui una alternativa cultural: Centro Cultural de la Juventud.
La apertura del festejo estuvo a cargo de Yemima, Ezequiel “el rulo” y Miguel. Ellos expresaron el orgullo y la alegría de estar festejando un año de este proyecto que comenzó siendo algo muy pequeño y que día a dia crece cada vez más.
“Antes estábamos todos separados, nos conocíamos, pero estaba cada uno en la suya. Hoy somos un grupo muy unido y cuando hay que hacer algo lo hacemos todos juntos” sintetizó Yemima en un tono que realmente emocionó a todos.
“Este lugar, hace un año, estaba vacío, no había nada. Ahora está lleno de cosas que se fueron haciendo con mucho esfuerzo” expresó el “rulo” señalando en las paredes y mostrando los trabajos de los distintos talleres.
Durante el transcurso de la noche los distintos talleres que se desarrollan en el Centro Cultural fueron exponiendo lo trabajado hasta el momento.
El primer turno fue para el taller de expresión a cargo de la coordinadora Gala, quien expuso los escritos que los niños realizaron durante el taller. Para concluir, tres chicos dejaron la timidez de lado para leer unos bellísimos cuentos ante la atenta mirada del público.
La murga se hizo presente en cada uno de los niños que la componen, en las fotos que empapelaron y llenaron de vida las paredes del Centro y en las glosas a través de las que Miguel (uno de los jóvenes coordinador del taller) sintetizó el sentimiento que significa ser parte de la murga.
El canto y la música no podían faltar a la cita. Por eso los chicos que participan del taller guitarra, junto a su profesor Augusto (Tuti), interpretaron algunas canciones populares que hicieron cantar a todos los presentes.
Un brindis y un canto desde el alma, por el cumpleaños, coronó el evento, junto con la invitación a sumarse a este gran proyecto y continuar caminando.
Fue un perfecto resumen de la conjunción entre lucha, voluntad y crecimiento. Y un claro ejemplo de que cuando la juventud se une y se lo propone, puede llevar a la concreción todos sueños.
Crónica Popular del Caminante (erica)